Entre la maleza de una noche
de lenguas mordidas
se interna suicida mi corazón
que persigue la ilusión de un ánima tuya
huidiza y deseada
como tus senos de cristal adolescente
Te escapas porque yo en sueños
incapaz de mover mis piernas de plomo
no avanzo
Impotente en este amor espeso
que se ha quedado sin saliva
Y me odio
por no ser capaz de alcanzarte
detenerte y obligarte ferozmente
con la violenta brutalidad del aliento
desnudo y amable
a no escupir de tus labios caprichosos
lo que llevas en el corazón prendido
No te arrepientas jamás
aprieta lo que puedas tu paso
alejándote magnífica de mí
Si llego a ti acabarás como este cuento
moriré yo de tus dolores
moriré yo de tus dolores
o no tendremos más remedio
que permitirnos ser honrados
y entregarnos derrotados los amores.
16 comentarios:
Una suplica a la deserción, un grito al amor en desamor y desesperación, geniales palabras dentro de ese sueño que no habla, canta. Genial como todo lo que tu mente crea, una genialidad, un genio. ¿Me repito? No me extraña.
Un besote corazón :D
Un poema de desamor debe reunir ciertas condiciones: debe dejar el estómago del lector patas arriba, y los sentimientos revueltos. Debe conseguir que la mirada se dirija a la ventana, y debe hacer soñar.A veces un poema no se desnuda del todo solo sugiere, pero si está bien escrito el lector recibe una patada cargada de emoción en la boca del estómago. Así ha sido.
Felicidades, genio. Un aplauso y un abrazo.
La mirada hacia atras, hacia un corazón que no te supo amar, siempre te hará ver las cicatrices dejadas por el desamor.
Felicidades por tan bellos versos.
Un abrazo
Irene, muchas gracias. Tanto me halagas que se va a notar que somos amigos, jajaja
Espero de verdad que te haya gustado.
Estoy disfrutando como no te imaginas de la lectura de esas cosas tuyas que tenía pendientes. Aunque voy más despacio de lo que me gustaría. Ya te contaré.
Un besote.
ÁNGELA, espero que el poema te haya gustado, pero no te haya dejado el estómago muy patas arriba. Si ha sido así, trataré de compensártelo en el próximo.
Cómo me gusta tu comentario. Me enseña mucho. Me encantaría si te hizo mirar a a la ventana.
Lo escribí con mucho amor.
Un beso
JOSÉ MANUEL, gracias por tu comentario.
Qué tremendas esas cicatrices. Aunque no creo que sea un corazón que no me supo amar.
Seguro que su ausencia aumentará mis pasiones, como diría tu amigo Rochefoucauld.
Un abrazo
...bueno, por mi estómago no te preocupes :) el tema de que lo pongas patas arriba es bueno, créeme. Es un placer leerte, Julio, eres todo un descubrimiento para mi. Me encanta cómo escribes, desde los poemas canallas que tienes por ahí detrás, esos que huelen a sábanas tibias, hasta estos últimos cargados de emoción. Por cierto, me gusta tu nuevo look.
Besazo, niño.
Julio, me ha gustado mucho...pero te voy a pedir algo, pública o privadamente quiero ver algo en prosa...
Un abrazo
ÁNGELA, gracias. Un beso.
CARLOS, te paso un relatillo. Gracias. Un abrazo.
Yo soy nueva por aquí y vengo a conocerte. Tú primer poema que leí me encantó, pero quiero seguír mirando tu blog. Aquí me quedo en tu casita encantada de la vida!!!Un abrazo
MIDALA, me he quedado impresionado con lo que he escuchado en el blog de Beatriz.
Sé bienvenida. Un abrazo.
Julio, un poema triste, pero muy bello, lo que no me gustó es ese odio que sientes por no poder alcanzarla, pero tiene tal intensidad, y tanta profundidad, que me ha encantado.
Un beso.
amor y desamor a bocanadas existiendo, cuanta impotencia en este hablante, reflejas un estado por el cual muchos pasamos, la duda y el desespero se hacen escozor genuino
Felicitaciones
un abrazo desde Chile
Gracias,MARÍA, me alegra que te guste a pesar de que me haya odiado por un momento.
Un beso.
ELISA, bienvenida a tu casa. Espero que te guste lo que leas y te agradezco que hayas llegado hasta aquí.
Un abrazo.
Cuando hay tanta magia, dulzura y pasión entre dos, es divino rendirse ante el amor.
Divina noche, sin duda.
Abrazo alados, Julio.
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