Gracias por venir.


Gracias por pasar por aquí.

El amor es esa enfermedad incurable,
que produce estados de dulce melancolía
y de sueños despiertos.
Dejo aquí mis síntomas, en forma de poemas,
escritos, dibujos, canciones...

Estás en tu casa. Ponte comod@.
Me gustan las críticas sinceras.
Espero que disfrutes.

domingo, 13 de noviembre de 2011

Dos sonetos extravagantes, unidos y desesperados (como tú y yo).

Sólo quería quererte
acorde disonante fui en tus madrugadas
expulsado del edén de tus miradas
qué triste muerte

echa sobre mí tus dudas
tus dolores rigurosos y tus miedos
las nerviosas vibraciones de tus dedos
lo que no disfrutas

échame a perder si quieres
no quiero ser sin ti nada
si insensible quedo de tus mieles

échame siempre la culpa
cuando te halles en desgracia
que yo soy el que te usurpa.

Mátame de penas viejas o difuntas
merecido lo tendré por difamarte
que si bien nunca dejé de ser tu amante
nunca supe darte lo que buscas

correr a tu encuentro transparente
vacío de todo cuanto huyo
y decirte todo lo que ves es tuyo
eso quiero hacer mágicamente

sin que quepa la máxima duda
ni la más pequeña incertidumbre
poder inflamarte de mi lumbre

si volviese a ser nuestra costumbre
embarcarnos en una aventura
portarías la vara más dura.

7 comentarios:

TORO SALVAJE dijo...

Dos sonetos en busca de amor.

Saludos.

Julio Benavente Caballero dijo...

O de no perderlo.
Gracias Toro, un saludo.

Irene Comendador dijo...

Que pasada de contracturas y acercamientos, el amor, mira que es resbaladizo a veces el condenado joé
Besos mi Julio, maravillosa la sensación que me dejas hoy ;D

Julio Benavente Caballero dijo...

Me alegro de dejarte buena sensación, a mí me la dejaste tú ayer. Gracias, un beso Irene

Anónimo dijo...

Vuelvo a repetir lo de siemre...
NO EXISTE AMOR IMPOSIBLE; EXISTEN PERSONAS INCAPACES DE AMAR.

No creo que dejes de luchar por lo que amas ;)

Besos

Julio Benavente Caballero dijo...

No pienso dejar de luchar, eso sería dejar de vivir. Besos

María dijo...

Sonetos profundos, unidos, que llegan, y es que cuando se ama no se puede dejar de luchar por ese amor.

Un beso.